M. Castells II

Para complementar la entrada anterior (sobre cambios sociales, Manuel Castells, la sociedad de la información y la necesidad de un cambio en el sistema educativo y la perspectiva docente), es necesario hablar de la nueva economía, el valor de la información y las transformaciones de las empresas.

Cuando hablamos de la transformación de las empresas, hablamos de capacidad de funcionar en la red (la antigua producción). Empresas estándar y de montaje, su organización interna y las empresas organizadas en redes no fijas, que se montan o desmontan en torno a proyectos que abalen su viabilidad.

El valor de la información empieza por el cómo hacerlo y el cómo distribuirlo. Encontramos ejemplos como Facebook o google.

Entonces, si existe un nuevo modelo de economía y se está experimentando un cambio social, ¿nuestro sistema educativo prepara para ser un trabajador cualificado?

Manuel Castells nos presenta de nuevo, su visión sobre los cambios en los procesos de trabajo, cambios sociales y como consecuencia, también en nuestros alumnos.

Cambios en procesos de trabajo:

-       Trabajador cualificado, auto programable, flexible (alto salario)

-       Trabajador ejecutor, rígido, sin iniciativa (bajo salario)

-       Desaparece la unidad de intereses entre trabajadores

Cambios sociales

-       Absolutamente imprescindible igualdad (y es una tarea pendiente)

-       Individualización

-       Interculturalidad

Cambios en nuestros alumnos

-       Nativos digitales (nacen con ello, nosotros sabremos más, pero los alumnos llegarán con ello de serie, su familiaridad es diferente)

-       Nuevos códigos

-       Estilo de aprendizaje

-       Intereses como visión

Buscando información al respecto de las categorías establecidas por el sociólogo, encontré una publicación que él mismo realizó en el periódico “El País”, el 20 de Mayo de 1997. Aquí os la dejo.

http://elpais.com/diario/1997/05/20/opinion/864079204_850215.html

Tras su lectura una de las cosas que más han llamado mi atención, es que una publicación de hace diez años, resulte, si el lector no se fija en la fecha, tan de “rabiosa” actualidad. Castells ya avisaba en 1997 de la necesidad del cambio en la educación y su preparación para un alumnado que se veía inmerso en la “nueva economía” y su incorporación a la sociedad de la información con una presencia imparable en la red.

Habla de todo lo que se ha citado anteriormente y termina la publicación con lo siguiente:

“Las dos contradicciones de la empresa red, a saber, entre dinamismo económico y desprotección social, y entre flexibilidad competitiva y estabilidad productiva, constituyen la trama del verdadero debate para empresas y trabajadores en la nueva economía global. Un debate en el que tendrán que avanzar nuestros empresarios y sindicatos para encontrar soluciones antes de que se consume la integración total de las economías española y europea en el nuevo ámbito global. Porque la globalidad funciona mediante redes y las redes son, hoy por hoy, socialmente incontrolables.”

Ilustración de Nestor Alonso

 2017 parece seguir en uno de los engranajes del cambio que no permite girar lo suficiente para encajar con la siguiente pieza, que por fin dé continuidad al circuito. Lo que la conclusión del artículo nos quiere hacer entender, es, que si no somos capaces de mantenernos al margen de las dicotomías que nos anclan en el pasado y no nos convertimos en formadores de futuros trabajadores cualificados, el sistema seguirá estancado e inmóvil, produciendo mano de obra ejecutora que mantenga la rigidez esperada. Y no se trata de formar una generación de alumnos que no puedan desempeñar una función ejecutiva, sino de formar generaciones y generaciones de alumnado que sean capaces de desenvolverse en cualquier ámbito con soltura y practicidad. Reconociendo sus potencialidades y sus desventajas y buscando subsanarlas con cooperación y trabajo en equipo. Y que, si nuestros futuros alumnos no son capaces de conocer, luchar y redirigir sus necesidades, con lógica, autocritica, creatividad y flexibilidad, nadie lo hará por ellos, pues al sistema le interesa mantener sus reglas y sino ¿qué ha ocurrido en estos diez años?